El Congreso mexiquense aprobó la expedición de la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro del Estado de México, cuyos objetivos incluyen promover esta actividad, especialmente en zonas rurales y en poblaciones en situación de vulnerabilidad; generar publicaciones accesibles; contribuir a erradicar el analfabetismo; así como apoyar a personas escritoras y la edición de sus obras.

El dictamen, que conjuntó las iniciativas presentadas por el diputado Edgar Samuel Ríos Moreno (morena) y el Grupo Parlamentario de MC, también considera lo relativo a materiales escritos en lenguas indígenas, en sistema braille y en lenguajes que faciliten el acceso a la cultura de personas con discapacidad, así como el fortalecimiento de la red de bibliotecas de la entidad y campañas en medios de comunicación.

Este ordenamiento, expuesto por el legislador proponente, establece las responsabilidades de las secretarías de Cultura y Turismo; de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación; del Consejo Editorial de la Administración Pública Estatal, así como de los ayuntamientos, para el cumplimiento de los objetivos.

Asimismo, dispone la creación de un Programa Estatal para el Fomento de la Lectura y el Libro como instrumento de política pública que organiza y articula las acciones para el acceso a materiales y plataformas de lectura; estimula la creación artística, técnica y académica de las y los mexiquenses; y contribuye al desarrollo de la lectura y la escritura en las lenguas originarias de la entidad.

Ambas secretarías y el Consejo elaborarán el programa, el cual será puesto a consideración de la persona titular del Ejecutivo estatal para su expedición. Deberá incluir un diagnóstico sobre la infraestructura pública y los medios a través de los cuales se puede acceder a la educación y la cultura, así como la identificación de prácticas, preferencias, hábitos y consumos de lectura en infancias, adolescencias, juventudes y el resto de la población.

Además, planteará objetivos, estrategias y líneas de acción; mecanismos de ejecución, seguimiento y evaluación; metas y alcances; medidas para privilegiar acciones en comunidades o grupos en situación de mayor vulnerabilidad; así como estrategias para dotar de acervo bibliográfico o digital a las bibliotecas públicas y apoyar la labor de personas escritoras, editoras, diseñadoras, distribuidoras, libreras, impresoras, traductoras y demás actoras que participan en la cadena del libro.

La diputada Maricela Beltrán Sánchez (MC) indicó que este dictamen surge del consenso y del trabajo coordinado para convertir la lectura en una política de Estado, con énfasis en la primera infancia, las juventudes, los pueblos originarios y las personas con discapacidad.

Previamente, en la reunión de dictaminación de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia, Tecnología e Innovación, el legislador Esteban Juárez Hernández (morena) subrayó que la nueva ley representa un avance en la construcción de una política pública integral, con atención a las brechas históricas en materia cultural y educativa de las comunidades rurales e indígenas.

Al respecto, la parlamentaria Nelly Brigida Rivera Sánchez (morena) solicitó verificar la correcta aplicación del dictamen en estas poblaciones, mientras que la legisladora Brenda Colette Miranda Vargas (morena) sostuvo que este instrumento jurídico responde al compromiso de democratizar el acceso al conocimiento.